Mar Tarazona. Odontóloga
Ya que con mayor frecuencia las causas de la halitosis son de origen oral, lo que primero debe ser evaluado y tratado es la boca.
Tratamiento oral
• Higiene oral: lo correcto es cepillarse los dientes después de cada comida principal, con efecto barrido desde la encía hacia el diente. Hay que usar el hilo dental o el cepillo interdental para limpiar los espacios interproximales entre los dientes. No hay que descuidar la limpieza de la lengua ya que este órgano es la mayor fuente de halitosis.
Si se utilizan prótesis removibles, es recomendable mantenerlas limpias y no usarlas mientras se duerme.
La mayoría de las cremas dentales y enjuagues enmascaran el mal aliento temporalmente y no solucionan el problema.
• Tratamiento odontológico: es fundamental mantener una buena salud oral y visitar con regularidad al odontólogo.
Tratamiento médico
Si el odontólogo determina que tiene la boca saludable y no se mejora con una buena higiene oral, habría que consultar con el médico para encontrar la causa del mal aliento.
Hay pacientes que consumen medicamentos que producen xerostomía, lo ideal para contrarrestar este efecto es ingerir abundante líquido y estimular la producción de saliva. Estos estimulantes salivales conocidos como sialogogos tienen efectos adversos que siempre hay que valorar a la hora de utilizarlos. El mal aliento puede ser síntoma de ciertos problemas médicos, muchos de ellos son enfermedades de difícil tratamiento y se prolongan en el tiempo, por lo cual la halitosis puede llegar a ser permanente o crónica, y en este caso sólo podremos utilizar remedios paliativos.
Alimentos
Lo ideal es tener una dieta rica en fibra que incluya granos enteros, junto con frutas y hortalizas frescas, que son ricas en antioxidantes.
Tomar yogur libre de azúcar, que tiene un cultivo vivo y nos ayuda a mantener lejos las bacterias que son responsables de causar mal aliento.
Hay que tener cuidado con los alimentos órgano-sulfurados como el ajo, la cebolla... evaluando de qué forma afectan a nuestro aliento ya que son buenos para la salud y descartarlos de la dieta no es beneficioso. Una rodaja de limón con sal puede ayudarnos si los comemos.
Beber té negro ayuda a mantener las bacterias lejos debido a uno de sus componentes naturales: los polifenoles. Otros tés que sirven para prevenir el mal aliento son el té verde, té de menta y el té con clavos de olor.
Consumir extracto de corteza de magnolia, se utiliza mucho en la medicina tradicional china como un poderoso antibacteriano. Se puede consumir en polvo y también en pastillas o goma de mascar.
Usar goma de mascar de canela, ya que tiene un aceite esencial vegetal (aldehído cinámico) que, además de dejar aroma fresco en la boca, ayuda a reducir el número de bacterias en la saliva hasta en un 50%. El chicle natural que tiene aceites de hierbabuena o menta es bueno contra el mal aliento. También puedes masticar salvia.
Beber mucha agua (por lo menos 8 vasos) durante todo el día.
La albahaca, el romero, el perejil y el tomillo pueden ayudar a deshacerse del mal aliento. También puedes utilizar comprimidos de alfalfa.
El hinojo se puede utilizar para colocar en las encías y la lengua para deshacerse del mal aliento.
Hacer gárgaras con una cucharadita de miel y canela en polvo combinadas con agua caliente. Se debe hacer por la mañana y te mantiene el aliento fresco durante todo el día.
El aceite de árbol de té tiene elementos que pueden desinfectar la boca y deshacerse de las bacterias. Se puede encontrar en pasta de dientes.
Los remedios herbarios funcionan no sólo para el mal aliento, sino también para la salud. No encubren la cuestión del mal aliento sino que trabajan para eliminar el problema. Cuando se padece halitosis crónica, el uso de la semilla de linaza nos puede resultar útil debido a sus ácidos grasos Omega-3, que pueden combatir las bacterias que causan mal aliento.
También puedes ayudarte de jugos naturales para intentar hacer desaparecer la halitosis:
1) Jugo con 250 gr. de zanahoria, 125 gr. de espinacas, 125 gr. de pepino y ½ vaso de agua. Beber 1/2 vaso después de las comidas.
2) Jugo con ½ remolacha, 1 pepino y 1 vaso de agua. Tomar un vaso a la semana. Potente limpiador hepático.
3) Jugo con ½ zanahoria, 1 manojo pequeño de col rizada y 2 ramas de apio. Tomarlo 2 veces por semana. Elimina las toxinas del hígado y tiene un alto contenido de clorofila, las vitaminas A, C y E.
4) Jugo con ½ manzana, 1 naranja y 1 manojo de espinacas. Tomar este jugo tres veces a la semana.
• Vitaminas: si tienes déficit de zinc puedes llegar a padecer de mal aliento. Deberías tomar suplementos de este mineral hasta alcanzar los niveles correctos. La falta de vitamina B también puede ser la causa, siendo entonces necesario tomar suplementos de vitaminas del complejo B. Aumentar el consumo de vitamina C ya que estaremos reforzando las defensas del cuerpo y mejorando la salud de la boca.
• Bebidas alcohólicas: el olor proveniente de los pulmones no es de origen bucal, es el resultado del proceso metabólico del alcohol. Su intensidad depende de la cantidad de licor ingerido, así como del metabolismo de cada persona.
• Tabaco: el aliento del fumador siempre es de un olor característico, aunque dependerá de la cantidad, del tipo de tabaco, de la higiene de la boca y de lo que le afecte a cada persona. Siempre puedes usar remedios para enmascarar el olor.
• Consumo de café: estudios recientes indicarían que el café no produce mal aliento de manera directa, pero sí que puede influir negativamente en el sistema digestivo.
Por último, hay que llevar a cabo cambios en los hábitos que favorezcan la oxigenación de la boca ya que beneficiará la salud oral y la calidad del aliento exhalado. Ingerir buena cantidad de agua y jugos naturales diariamente. Consumir frutas en los intervalos de las comidas principales. Evitar el consumo excesivo de carne roja y productos lácteos. Debemos entender la halitosis como una situación propia de la naturaleza humana, que cuando aparece hay que tratarla y no permitir que cambie tu forma de vivir.