Martín Ribes. Especialista en Marketing con Alma para Terapeutas. Formador de Alto Impacto
Te gustaría conocer algunos de los errores que cometes como terapeuta, coach o gestor de centros de desarrollo personal, y que te están impidiendo vivir prósperamente de tu vocación? Pues voy a ir directo al grano y te los voy ir contando porque a mí me vino muy bien tener esta información.
Error número 1: Creer que no eres un empresario. Lo eres desde el momento en que alguien te paga por tus servicios. Eres un pequeño empresario, que con el tiempo se puede hacer grande, y debes verte como tal. Y vas a tener que darle cabida y desarrollar a 3 personajes que te habitan: al Gestor, al Emprendedor y al Técnico.
El Gestor que hay en tu interior va a ocuparse de los números, de darse de alta en la Seguridad Social, de hacer la declaración, de tener un seguro de responsabilidad civil, etcétera. Y vas a poder delegar algunas de sus funciones -pero va a ver algunas que no- y te vas a tener que sentar, hacer números y hacer lo que hay que hacer como gestor, te guste o no.
El Emprendedor que te habita va a pensar en grande, va a atreverse a salir ahí fuera, salir de su zona de confort y arriesgar. Va a tener que encajar el “no”, va a mostrarse al mundo a pesar del “qué dirán”, intentará estar siempre en “modo solución”, va a invertir en marketing y a desarrollar a tope su creatividad. Pero, sobre todo, va a mantenerse firme en su cometido y honrar su sueño, su vocación. Y a este no le puede sustituir nadie. Al emprendedor lo vas a tener que desarrollar tú, cien por cien, sí o sí.
El Técnico es el terapeuta, el coach, el formador. Esta es la función que mejor sabemos llevar a cabo y con la que más disfrutamos. Los mágicos momentos que vivimos encarnando este personaje hacen que valga la pena con creces haber tenido que encarnar los dos anteriores. El milagro de atestiguar y ser parte del cambio de una persona hacia su crecimiento y bienestar no tiene palabras. Es por esto por lo que el sueño tira de ti.
Error número 2: Puedo ayudar a todo el mundo. No es cierto. Tu terapia, o medicina como dirían los chamanes, no es para todo el mundo. Es importante que te especialices en lo que haces y que de cara al público seas una autoridad en una sola cosa, aunque practiques muchas otras.
Escoge bien a tu cliente, aquél que está dispuesto a recibir tu terapia y que sabes que vais a hacer un buen equipo. Te voy a hacer tres preguntas que te pueden ayudar en esta línea: ¿a quién le puede ser de mucha ayuda lo que tú haces? Y de estos, ¿cuáles son los ideales? Y de estos, ¿cuáles te interesan a ti?
En el entrenamiento que facilitamos en Tu Consulta A Tope hacemos mucho hincapié en esto. Ayudamos a los asistentes a descubrir en qué son muy, muy buenos, para que sepan escoger al cliente adecuado, aquel que tú sabes que le vas a ayudar, y a los que intuyes que no, los derivas o simplemente decides no trabajar con ellos. A veces lo cogemos todo por la necesidad de obtener ingresos. Créeme, si escoges bien a tu cliente tendrás más éxito en tu terapia, subirá tu autoestima, le darás más valor a tu trabajo y, en consecuencia, aumentarán tus ingresos.
Error número 3: Creer que vender es malo. Y yo te pregunto: ¿Estás vendiendo neveras a esquimales en el Polo Norte? Vender es servir. Cuanto más vendas tus servicios, a más gente vas a poder ayudar y más facilitarás la posibilidad de un mundo mejor. Así que libérate de los bloqueos psicológicos que te impiden desarrollar tu profesión de terapeuta conectando con tu misión, y ofrece (vende) tus servicios. No tienes que cerrar una venta, tienes que abrir el Corazón de tu cliente para que esté preparado para trabajar contigo.
Y si piensas que lo que tienes -tu don, tu servicio, tus conocimientos- puede cambiar la vida de una persona, no comunicárselo significa no darle la oportunidad de cambiar su vida: ¡le estás perjudicando!
Vender es poner un valor a lo que tú haces. Y tú lo haces muy bien. Entra en la fórmula ganar - ganar: uno tiene un problema y tu consideras de corazón que le vas a servir de utilidad y se sella un precio que los dos consideráis justo. Y se acabó. Recuerda que hay que saber dar y saber recibir.
Y sé de unos cuantos errores más que el terapeuta carente comete pero en este artículo no puedo pasar de las 850 palabras, así que os espero en el próximo número… Ahó!
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El 29, 30 de abril y 1 de mayo del 2016 Martín Ribes facilitará el taller "Tu consulta a tope". Un entrenamiento intensivo de Marketing para Terapeutas, Coaches y Formadores enfocado en la Venta con Corazón.
Más información en www.epopteia.es 615 856 360 Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo.