Martín Ribes. Formador en Chamanismo Práctico®
En el mundo espiritual y en términos generales sentimos cierto rechazo hacia el poder y creo que se debe, en cierta medida, a que los que han estado o están en el poder, por lo general, hacen un mal uso de este. Y es una verdadera lástima dado que este sentimiento nos aleja de nuestro propio poder personal y espiritual. Ante esto, decir que el poder es en realidad algo neutro, que se puede utilizar en cualquier sentido. Como el fuego, lo puedes usar para cocinar o lo puedes usar para destruir.
Lo admitamos o no, necesitamos de cierto poder para contar con los recursos necesarios cuando nos encontramos en circunstancias adversas. Hoy en día, debido a nuestra falta de contacto con la quietud y con nuestro mundo interno, podemos caer muy fácilmente en la incertidumbre y el desequilibrio. Si disponemos de fuerza y poder seremos capaces de mantener nuestra estabilidad interna, aunque las circunstancias ahí fuera no sean las más propicias.
Considero que no debemos depender de otros, ni de los políticos, ni los médicos, ni los religiosos, ni los científicos para que den con la fórmula que nos vaya a proporcionar nuestro bienestar. Ni tampoco de nuestro dinero, posesiones, cargos, profesión o clase social, pues esto implica que lo de fuera es lo que nos proporciona el poder, y no está en nosotros. Por eso es interesante desarrollar la capacidad de generar bienestar por nosotros mismos, independientemente de lo externo.
Es aquí donde, en mi caso, encuentro las artes espirituales del chamanismo como una fantástica vía para la obtención de poder espiritual y, como consecuencia, poder personal. Y hablo de "artes" porque, al igual que las asanas (posturas) del Yoga son efectivas sin tener que seguir la religión hindú, las prácticas chamánicas también ofrecen resultados muy interesantes sin la necesidad de contar con grandes conocimientos sobre el chamanismo o su cosmovisión. Estas prácticas implican una ampliación de la conciencia y generan una serie de fenómenos internos que permiten el desarrollo de nuestro espíritu humano. Y esta evolución ocasiona, inevitablemente, un incremento del poder personal, obteniéndose resultados muy sorprendentes.
Y no estamos hablando de filosofía, sino de pura utilidad práctica. En mi caso, cuando volví a España para casarme con mi mujer, tras siete años de estar viviendo fuera, solo contaba con una furgoneta, unos pocos ahorros, un tambor y mucha fe. Gracias a mi poder personal y a la aplicación de las artes chamánicas vivo hoy en día con solvencia de mi vocación, he creado, junto a mi mujer, un maravilloso hogar, unas consultas y una escuela de chamanismo por las que han pasado cientos de personas cuyas vidas han mejorado. Y me encanta mi vida. Mi salud, la calidad de mi tiempo, mis relaciones profesionales y familiares son excepcionales y sigo aspirando a hacer cosas extraordinarias.
El aumento de nuestro poder personal y espiritual supone un hermoso compromiso con la comunidad humana. Si somos capaces de sentirnos bien por nosotros mismos ya no seremos una carga parar otros, y eso ya es mucho avance. Y si además somos capaces de expandir ese bienestar a nuestra familia y luego a un colectivo, eso es un nivel de desarrollo superior porque podemos influir en un número cada vez más grande de personas. Y al final poder afectar, como en el caso de Nelson Mandela, a millones de personas.
Mandela logró acabar con el régimen del apartheid de segregación racial en Sudáfrica e instaurar un modelo democrático pacífico, convirtiéndose así en el primer presidente negro de su país. Y no lo hizo con violencia, ni tanques, ni aviones, ni misiles, sino desde la cárcel donde pasó 27 años y donde encontró su poder espiritual y personal. Y como él, otros como Mahatma Gandhi, Martin Luther King y Teresa de Calcuta.
Quizás no todos podamos, ni queramos, llegar a alcanzar el poder de estas personalidades, pero si que es importante apuntar hacia ello o como mínimo aspirar a llevar una vida confortable y que nos guste. De verdad que es un privilegio contar con recursos y poder suficientes para realizar con desahogo las cosas que queremos en la vida. Y las artes chamánicas son unas prácticas que nos pueden ayudar a conseguirlo.
Dicho esto, te aliento a que te liberes de tus conflictos con el poder y desarrolles el tuyo propio, por tu propio bien y el de toda la humanidad... ¡Ahó!
El 16 y 17 de febrero del 2019 Martín Ribes y Ana Pérez facilitarán en Valencia el taller de 2 días "El aprendiz de chamán".
Un taller en el que aprenderás técnicas para el desarrollo del espíritu humano y aumentar tu poder personal y espiritual.
Más información en www.epopteia.es, 615 856 360, Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo.