Emi Zanón. Escritora y comunicadora
Ya está aquí el nuevo año y qué mejor manera de empezarlo que abrazando la vida toda una, en la que, por supuesto, estáis/estamos todos incluidos. Gracias por vuestra fidelidad, por seguir mes a mes estos artículos que nacen desde lo más profundo de mi Ser y comparto con vosotros gracias a este medio que me brinda esta gran oportunidad.
Me siento muy feliz y contenta por el hecho de que este año 2019 haya sido proclamado por la Asamblea General de la Organización de Naciones Unidas (ONU) como el Año Internacional de las Lenguas Indígenas, y como el Año Internacional de la Tabla Periódica de los Elementos Químicos. Una valiosa oportunidad para promover, por un lado, el derecho a revitalizar, utilizar, fomentar y transmitir a las generaciones futuras los legados culturales de los pueblos indígenas (historias, idiomas, tradiciones orales, filosofías, sistemas de escritura y literatura...), y por otro, una valiosa oportunidad para promover la cooperación internacional en las ciencias fundamentales al servicio del desarrollo sostenible y la educación científica.
Que la ONU haya contemplado y apoyado a las ciencias y las humanidades por igual, en este nuevo año, es un buen indicativo. Un ejemplo a extrapolar en todas las vertientes de nuestro mundo actual tan diverso y enriquecedor, en el que tan importante es nuestro desarrollo científico como humano. Sonia Fernández-Vidal, física y escritora, elegida por la revista Forbes como una de las 100 personas más creativas del planeta, es un buen ejemplo de ello. En su paso por el CERN, ha podido ver claramente cómo el hecho de intentar descubrir el origen del universo puede hacer caer cualquier frontera. Y ha visto igualmente la necesidad de acercar la ciencia a los niños de 9 a 99 años, con relatos de aventuras entrañables que hablan de física cuántica con la misma naturalidad que de elfos y hadas. La ciencia, la fantasía, la imaginación... de la mano para entender el mundo.
La riqueza del mundo es su diversidad: todo lo que nos ofrece es para un bien y fin común. Y no nos cansaremos de repetirlo. Un museo como el Louvre de Abu Dhabi (Emiratos Árabes Unidos), inaugurado en noviembre de 2017, es otra buena muestra de ello. Un producto cultural ambicioso, un punto de encuentro de todas las civilizaciones, religiones, culturas y continentes más importantes del planeta.
Vivimos tiempos de cambios, de transición, de incertidumbres, crisis, manipulación... Es cierto. Pero también lo es que disponemos más que nunca de un sinfín de oportunidades y herramientas para superarlos: el autoconocimiento, la creatividad, la educación en valores, el avance científico y tecnológico... todo ello, junto a nuestra fuerza interior y nuestra visión optimista y esperanzadora para nuestra especie y su evolución en este hermoso planeta, permitirá o hará posible que adoptemos siempre las decisiones correctas y podamos llevarlas a buen término.
Desde aquí, pues, mis mejores deseos para todos vosotros en esta nueva andadura que comenzamos junto a la Madre Tierra alrededor del Padre Sol. Espero que dejéis atrás todas las cargas que lleváis sobre vuestras espaldas, que os deshagáis de ellas de una manera amorosa y abracéis la vida toda una, y la sintáis de verdad, como canta Luis Fonsi en su canción "Abrazar la vida"; que la sintáis ligeros de equipaje para que vuestra divinidad pueda ser y pueda brindaros un amplio entendimiento de la Vida, que a su vez ampliará la conciencia de toda la humanidad.
¡Feliz 2019!
¡Paz, amor y prosperidad!