Sayari Mati. Facilitadora de tantra, círculos de mujeres, reiki y profesora de yoga
La sexualidad es la base de la vida. De ahí venimos tod@s: nosotr@s, los animales y todo ser vivo. Es esa fuerza que puja por abrirse paso siempre y nosotr@s la hemos convertido en algo lleno de tabúes, algo sobre lo que da vergüenza hablar, algo sobre lo que o no se habla mucho o se habla entre amig@s, de cachondeo y normalmente con mucho desconocimiento.
Me gustaría hablaros aquí de la importancia de una sexualidad sana, para volver a conectar con esa idea primigenia de sexualidad como forma de hacer que la energía de la vida pase a través de nosotros de una forma fluida, sin obstáculos mentales, físicos o emocionales. Y de eso se encarga el tantra.
Algunas vertientes espirituales condenan la sexualidad como algo que tiene demasiada fuerza y que es mejor negar o bloquear para que no nos cause demasiados problemas o desequilibrios en nuestras vidas. Yo entiendo que confunden la sexualidad con la lujuria, que es un desequilibrio, una forma de conducta insana.
El tantra por el contrario te dice “atraviesa la sexualidad, sánala, y haz que todo ese potencial, toda esa fuerza te lleve hacia la supraconciencia… trasciende tu propia sexualidad”.
Esto requiere unas prácticas, un caminito, un tiempo. Y en mis talleres pretendo ir mostrando formas de hacerlo.
Mi método es prácticamente experiencial. Trabajo sobre todo con el cuerpo. Como todo está relacionado, cuando hay bloqueos a nivel emocional o mental, pues aparecen también a nivel físico. Aparecen para desaparecer después. Estos procesos son bienvenidos. Todo lo que aparece en la vida aparece para ser visto, amado, abrazado y transmutado. La energía siempre se va transformando, constantemente. Así es la vida por lo menos aquí en la Tierra, todo va cambiando. Primavera, verano, otoño, invierno.
De manera que cuando nos aferramos a algo, lo bloqueamos y no dejamos que la energía fluya por nuestros cuerpos y de la misma manera, cuando negamos algo y no lo queremos ver, sigue adentro de nosotr@s, en forma de bloqueo. Por eso en tantra se trabaja tanto con los chakras, para que la energía fluya libremente por nuestro sistema.
Las bases del tantra son la respiración, el movimiento, la voz y el manejo de la energía.
Sobre esos cuatro aspectos profundizo en mis talleres y abogo por el cultivo individual. No suelo trabajar en parejas o proponer dinámicas en pareja precisamente para que no se despierten patrones de relaciones de conducta insanos. He visto en mí misma y en compañer@s de tantra que a veces nos regodeamos en nuestros propios patrones de falta de compromiso y exceso de libertinaje, con lo que tampoco estamos avanzando precisamente, y ahí el tantra puede ser un freno a nuestra propia evolución.
Por otro lado también he visto en talleres a personas saltarse sus propios límites a la hora de interactuar con parejas con las que no sentían hacerlo o con las que no les apetecía hacerlo en base a una falsa creencia de ser así más abiert@s o más liberales o por miedos.
Los límites se van cayendo según vamos avanzando. Los entendimientos y comprensiones celulares vienen según nuestra consciencia se va trasformando, según nuestro caminar se va dando.
Así que no hay ningún lugar al que ir, no hay ninguna prisa, sino la escucha profunda de nuestra propia verdad, la aceptación de dónde nos encontramos ahora mismo.
También solemos identificar nuestra sexualidad con la persona que está afuera, y no con nosotr@s mism@s, como si l@s grandes activadores de nuestra energía sexual fuesen l@s otr@s y por el contrario cuando no hay otr@s, sentimos que no estamos teniendo sexualidad. Y esta creencia es errónea. La sexualidad es siempre nuestra, es como todo lo demás.
Ya sabemos que no es sano ni razonable dejar nuestra felicidad o proyectos de vida en manos de otr@s, ni basar nuestras relaciones de pareja en la economía o en dependencias varias… pues, con la sexualidad ocurre lo mismo. La sexualidad la sentimos nosotr@s, es nuestra. Es nuestra responsabilidad hacernos cargo de nuestras emociones, pensamientos, acciones y también de nuestra sexualidad. Por todo esto trabajo casi siempre con la individualidad.
Y solo propongo talleres a dúo con parejas que se han elegido voluntariamente antes de venir a los talleres específicos de “Tantra para parejas” o “Secretos de alcoba a dúo”.
Creo que ya toca hacerse cargo de nuestra sexualidad, ya es hora. Si no lo hacemos nosotr@s, ¿quiénes lo van a hacer?
Todavía hay países en los que se está luchando por abolir la ablación, prostitución infantil, etcétera.
También aquí tenemos un largo caminito que hacer: sanación de heridas, luchas de poder, descubrir el cuerpo… así que es una bendición que nos concedamos estos espacios de sanación y de gozo en la sexualidad, en la vida.
Próximos talleres: “Secretos de alcoba”, domingo 16 septiembre.
“Mujer Salvaje Mujer Sagrada”, 6 y 7 octubre.
“Tantra para todos”, domingo 21 octubre.
Más info en sayarimati.com